jueves, 16 de febrero de 2012

El vicio de la tristeza.

Dicen que la tristeza es un vicio. Sin saberlo me he enganchado a esta mala droga. Empecé tonteando con ella, pensando que un nuevo día me haría olvidarla.., sin embargo y para mi desgracia, no ha sido así. Ahora es mi fiel compañera, la que me sigue a todas partes y por más que intento alejarme de ella, no sé cómo se las apaña, pero me hace recaer. No puedo evitar pensar en ella a cada instante. Todo cuanto me sucede me obliga a recordarla, a tenerla presente. No sé cómo deshacerme de ella porque me ha invadido y ha invadido cada rincón de mi casa. No puedo echarla así como así, porque despedirme de ella sólo me hace sentir aún más pena.

martes, 7 de febrero de 2012

Pase lo que pase.

Pase lo que pase que me queden la escritura y las ganas de escribir. No concibo una vida alejada de las palabras. Por más que intento alejarme, siempre vuelvo a ellas arrepentida, sumisa, dispuesta a entregarme en cuerpo y alma y a encontrarlas de entre el barullo que hay en mi mente para lanzarlas con frenesí sobre el papel. Pase lo que pase en este incierto vivir que no me fallen las palabras, que a fin de cuentas son mis más fieles compañeras.